Está bien no lucir ”bien”

Te miras al espejo y te das cuenta que otro ‘’granito’’ se ha propuesto dañar tu día. 

Ni hablar de las ojeras que se posan más abajo de los ojos. Tampoco, de las arrugas que se marcan en tu frente.

Ahí parada también ves que tu abdomen amaneció más hinchado que de costumbre, y que los cambios de peso han provocado que las estrías se cuelen en tu piel. 

Un grupo de imperfecciones que te hace más humana. Sin embargo, cueste lo que cueste, quieres eliminar de ti.

Hoy te digo, amiga, está bien no lucir ”bien”.

Está bien no lucir ”bien”, porque no eres igual que la de al lado. Que más que enemiga, es tu compañera de lucha en una sociedad patriarcal.

Está bien no lucir ”bien”, porque las imperfecciones cuentan tus luchas y sacrificios. 

Está bien no lucir ”bien”, porque no eres un objeto.

Está bien no lucir bien, porque al final cada día eres más humana.